“Mi práctica es la de vivir de tal manera que no tenga nada de lo que arrepentirme en el momento de la muerte”. Milarepa.
Todos nosotr@s pasamos a lo largo de nuestras vidas por múltiples situaciones,algunas de las cuales nos marcan hondamente y si observamos bien,hay tantos y diversos detalles que parecen que en una vivimos múltiples existencias.La vida es una oportunidad maravillosa y si la vivimos desde la lucidez y la conciencia,podemos hacer que esté llena de sentido y significado,haciendo que nuestra existencia sea beneficiosa para nosotr@s y nuestros semejantes.“Que nada humano te sea ajeno e indiferente“.
Si comprendemos la fugacidad de las cosas,si aprendemos a mirar profundamente,veremos que hay dos principios básicos a tener presente:que todo es impermanente e interdependiente a un tiempo.Esa comprensión nos libera de todo apego o rechazo y nos ayuda a actuar con ecuanimidad,comprensión, conciencia,respeto y libertad.Al hacerlo así,nos sentimos por fin libres y podremos vivir y acompañar a otros en el proceso de vivir mejor y más auténticamente.Asimismo nos faculta para estar dispuestos a partir en cualquier momento y para acompañar a otros en estas circunstancias.La vida merece ser vivida y podemos hacer de ella una verdadera obra de arte.Séneca decía que aprender a morir es dejar de ser esclavo y hay en esta afirmación algo que resulta evidente,pues educar para la muerte es educar para la vida y nos ayudará a vivir con más sentido y plenitud.
No hay comentarios:
Publicar un comentario